CAMARCO alerta sobre la crisis de la construcción y reclama un plan federal a 20 años

CAMARCO alerta sobre la crisis de la construcción y reclama un plan federal a 20 años

La Cámara Argentina de la Construcción (CAMARCO) volvió a encender las alarmas: la actividad atraviesa una crisis marcada por la paralización de obras, incertidumbre financiera y caída del empleo. En su Consejo Federal realizado en Paraná, la entidad llamó a implementar un “plan federal de trabajo con horizonte de 20 años” para revertir la tendencia.

“Reafirmamos nuestro compromiso con el país, con sus instituciones, con sus trabajadores y con cada argentino que espera que la infraestructura sea una herramienta de inclusión, progreso y equidad. La construcción no es solo una actividad económica: es proyectar futuro y construir sociedad”, señaló CAMARCO.

Obra pública y privada en retroceso

El freno en la inversión pública afecta rutas, puertos y energía, mientras que la construcción privada “también está paralizada”, advierten. Esto genera un efecto dominó sobre proveedores, empleo y la competitividad de la economía. “Cuando la construcción se detiene, se resiente todo el entramado productivo”, subrayaron.

Propuestas de la entidad

El plan federal planteado por la Cámara incluye:

  • Reactivar obras paralizadas con avances significativos.

  • Reconocer las deudas del Estado con constructoras.

  • Financiamiento mixto con mayor participación privada.

  • Impulso al crédito hipotecario y desarrollo inmobiliario.

  • Transparencia y eficiencia en ejecución de obras.

  • Capacitación en oficios y fortalecimiento de gobiernos locales.

Un sector en números rojos

Las estadísticas confirman la preocupación. Según el INDEC, la construcción cayó 1,8% en julio y acumula una tendencia negativa de 1,2%. En paralelo, el Índice Construya (IC) registró una baja interanual del 5,5% en agosto, reflejando el enfriamiento de la demanda de materiales.

Una advertencia con proyección federal

Para CAMARCO, la falta de inversión agrava la “deuda de infraestructura” del país y resta competitividad a las economías regionales. “Queremos ser parte de la solución. Queremos que la infraestructura vuelva a ser una herramienta de transformación”, concluyeron.